Asma: científicos descubren la raíz de esta enfermedad

En menos de cinco años sería posible contar con una nueva terapia para tratar la afección gracias este gran hallazgo.

Científicos afirman haber encontrado la causa del asma, un avance que podría allanar el camino para un nuevo tratamiento dentro de cinco años.

La mayor parte de los millones de enfermos de asma son capaces de regular sus síntomas con los inhaladores, pero una minoría (alrededor del 5 por ciento de los pacientes) no responden a ningún tratamiento.

Recientemente los científicos han descubierto una proteína en las vías respiratorias que creen es la que desencadena todos los ataques de asma.

Sorprendentemente, se cree que un medicamento ya existente en el mercado podría desactivar la proteína, aumentando las esperanzas de un tratamiento que pueda ser eficaz para cualquier paciente con asma.

El equipo de investigadores, liderado por la Universidad de Cardiff, ya ha demostrado que el medicamento funciona en ratones y en muestras de tejidos humanos en el laboratorio.

Ahora han diseñado los primeros ensayos clínicos, que podrían empezar dentro de dos años.



Prof Daniela Riccardi
La profesora e investigadora principal, Daniela Riccardi, dijo: "nuestros resultados son increíblemente emocionantes."

El descubrimiento se produjo por casualidad cuando la profesora Riccardi, anteriormente especialista en huesos con importante trayectoria, pasó de estudiar la osteoporosis, a estudiar los pulmones cinco años atrás.

Se dio cuenta de que una proteína que desencadena el crecimiento de calcio dentro de los huesos también juega un papel en las vías respiratorias.

Varias pruebas revelaron que los asmáticos tenían niveles mucho más altos de la proteína, llamada receptor sensible de calcio o CaSR, que las personas sanas.

Cuando un asmático respira en factores desencadenantes, como el polvo, el humo o el polen, las moléculas CaSR hacen que que aumente rápidamente el calcio dentro de las células del tejido pulmonar.

El calcio añadido provoca la contracción de las células, dando origen al espasmo de las vías respiratorias, lo que tiene como resultado el desencadenamiento de un ataque de asma.

La profesora Riccardi, dijo: "por primera vez hemos encontrado una relación entre la inflamación de las vías respiratorias, que puede ser causada por factores desencadenantes ambientales, tales como los alergénicos, el humo del cigarrillo y humo de los coches , y las vías respiratorias en el asma alérgica”.

"Hace que las células sean más sensibles al desencadenamiento del asma, que luego hacen un ataque mucho más probable."

Un medicamento que ya existe puede desactivar la proteína CaSR, lo que significa que podría estar disponible para los pacientes tan pronto como los ensayos clínicos sean completados.

El medicamento, denominado calciolítico, fue desarrollado hace 15 años para “noquear” a la misma proteína en la osteoporosis.

Aunque el fármaco ha demostrado ser seguro, no era eficaz para pacientes con osteoporosis.

Pero las primeras pruebas en ratones y tejidos humanos mostraron resultados prometedores como tratamiento para el asma.

El equipo, que incluyó a científicos de Kings College de Londres y la Clínica Mayo en los EE.UU., espera poder utilizar el fármaco en un nebulizador, en el que se convierte en una niebla que puede ser llevada directamente a los pulmones de los pacientes mediante la respiración.

Unos cursos de tratamiento serían suficientes para evitar que los ataques de asma se repitan.

Este hallazgo también podría tener un papel importante en la lucha contra la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)  y la bronquitis crónica, para los que actualmente no existe un tratamiento eficaz.

La profesora Riccardi, comentó además: "si podemos demostrar que los calciolíticos son seguros cuando se administran directamente al pulmón en las personas, entonces en cinco años podríamos estar en condiciones de tratar a los pacientes y potencialmente detener asma antes de que suceda por primera vez."



La Dra Samantha Walker, directora de investigación de Asthma UK, que ayudó a financiar la investigación, agregó: "este enormemente emocionante descubrimiento nos permite, por primera vez, hacer frente a las causas subyacentes de los síntomas del asma”.

"El cinco por ciento de las personas con asma no responden a los tratamientos actuales por lo que hallazgos tan grandes como éstos pueden determinar un importante cambio de vida para cientos de miles de personas".

"Si esta investigación tiene éxito, podemos estar a pocos años de distancia de un nuevo tratamiento para el asma, y necesitamos urgentemente una mayor inversión para llevarlo más lejos a través de ensayos clínicos".

"La investigación del asma tiene una insuficiencia crónica de fondos; sólo ha habido un puñado de nuevos tratamientos desarrollados en los últimos 50 años por lo que la importancia de la inversión en la investigación de este tipo es absolutamente esencial ".